jueves, 19 de abril de 2018

Crónicas de LaborESO de alumnos de 3º ESO B


Crónica de Manuel Abascal

Empresa: Móvil Z

En mi estancia en LaborESO estuve bastante cómodo ya que tuve que realizar bastantes tareas.

El primer día estuve ordenando y clasificando pantallas rotas de iPhone y otras labores varias, ese primer día fue raro y me tuve que adaptar ya que era la primera vez que hacía algo parecido. El segundo día estuve más cómodo, mi principal tarea fue ayudar a los demás compañeros. El tercer día ya hice tareas más serias y con mayor importancia, como copiar datos, revisar placas bases de móviles y reparar teléfonos mojados ya que ellos me vieron con capacidad de hacerlo y de trabajar seriamente. Así que los demás días ya reparé móviles de diferentes marcas como iPhone, conseguí arreglar un móvil y me sentí muy bien y tuve que desestimar muchos otros ya que no era posible arreglarlos. También aprendí cómo pedir piezas necesarias a los proveedores de la empresa y llamar para avisar a los clientes de si había sido posible arreglar su teléfono.

Personalmente, volvería a tener esta experiencia ya que me ha aportado mucho y he podido trabajar en lo que me gusta y así tener más claro lo que quiero estudiar en el futuro. Además, tanto su valoración como la mía han sido buenas y el jefe de la empresa me pidió personalmente mi número de teléfono, lo cual yo creo que es buena señal.



Crónica de Mónica Gandarillas

El pasado miércoles 28 de marzo, terminé mi experiencia en la Residencia Los Robles, el centro geriátrico que me fue asignado para mi primer contacto laboral a través del programa LaborESO. En mi opinión, ha sido uno de los mejores momentos de mi estancia en el instituto. Me ha aportado un gran aprendizaje que en el futuro me gustaría poner en práctica.

Yo entraba a las 8:00, iba al vestuario y me ponía el uniforme. A continuación, asistía a las reuniones del personal, donde hablaban de a quién darle la medicación y a quién había que curar. Al terminar la reunión, iba con la enfermera supervisora y yo me encargaba de hacer glucemias, tomar la tensión y comprobar si se tomaban la medicación. Después iba con ella a ayudarla a curar. Sobre las 12:00 hacía las gráficas de las glucemias y de las tomas de tensión y al terminar acompañaba a otra enfermera a hacer test psicológicos. Finalmente, desde las 12:45 hasta las 14:00 ayudaba a las auxiliares a dar de comer en el comedor a los usuarios, y al terminar iba al vestuario y me cambiaba.

Sinceramente, no tengo ninguna pega ni de mi experiencia ni de su empresa, ya que han hecho una labor increíble. Espero que nunca cierre esa residencia, ya que tiene un personal magnífico y muy educado.

Crónica de Santos Diego Cruz

El Instituto es un lugar en el que nos preparamos, con la ayuda de estudios y profesores, para “el futuro”, ese momento en el que estamos listos para trabajar y ganarnos la vida del método que podamos o consideremos más apropiado. Pero, ¿qué mejor forma de enseñarnos el mundo laboral que dejarnos sumergirnos en él para así hacernos una idea de nuestro posible trabajo?

Esto es lo que ofrece el proyecto LaborESO: una estancia de dos semanas en una empresa seleccionada según nuestros gustos.

En mi caso esa empresa fue la Biblioteca Municipal de Santander, lugar en el que aprendí una gran cantidad de datos, labores y acontecimientos que allí se daban.


A lo largo de las dos semanas que pasé en el centro llevé a cabo todo tipo de actividades y tareas relacionadas con el oficio, desde la ordenación de adquisiciones bibliográficas recibidas hasta la atención al público, encargándome de préstamos y devoluciones tanto de libros como de ordenadores.

Al ser un trabajador más, tuve la oportunidad de acceder a zonas únicamente disponibles para el personal, con lo que observé material antiquísimo que no mucha más gente ha visto. Pero, si tuviese que quedarme con algún gran recuerdo, sería con mi visita a la Biblioteca Menéndez Pelayo, donde a cada paso que daba me encontraba con libros tan antiguos y con tanto valor que serían comparables con gemas preciosas.


Para finalizar esta crónica, únicamente quiero que todos aquellos a los que se les ha ofrecido esta oportunidad o se les va a ofrecer sepan que puede resultar bastante enriquecedora si se muestra interés y se pone empeño.


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